Hoy ha sido un día bonito y a la vez complicado, veréis, adoro los perros y el trabajo que hago. Suelen traerme perros difíciles porque se me dan bien, la psicología canina es algo que muchos peluqueros caninos deberían plantearse aprender. ¿Por qué digo esto? Pues bien, muchos de los perrines que vienen desesperados, asustados, cabreados o con problemas de carácter pueden trabajarse con una dosis alta de paciencia y autocontrol, dulzura y firmeza. Algo que al parecer algunos o muchos compañeros de profesión no tienen, bien es verdad que tal y como dice la imagen ahí se diferencia un peluquero canino de una persona que pela perros. Como profesional me molesta que haya quien no acabe su trabajo bien porque el perro se porta mal. Hay dueños que no ayudan pero otros están cansados de recorrer peluquerías caninas sin conseguir resultados, el caso es que hoy vino una señora con una perrita llamada Dina, en diez años le ha dado tiempo a recorrer casi todas las peluquerías que hay por la zona, la han llamado cada vez porque no podían terminar a su perrita. Pues bien, hoy pasó por Chuchos & Cía y se quedó para ayudarme a sujetarla si se ponía muy brava y no podíamos con ella. Su sorpresa ha sido mayúscula cuando ha descubierto que no sólo hemos conseguido hacerlo, sino que tampoco ha sido necesaria una sesión de sumo con la pobre Dina para conseguirlo. Os preguntaréis si hemos tenido la visita de algún hada buena con una varita mágica......Pues no, no es necesaria el hada, a veces solemos pensar que el perro tiene miedo o que ha sufrido daño con otro profesional y por eso no se deja pelar, pues bien, a veces será verdad, de todo hay, pero la mayoría de las veces el perro no quiere hacer algo y simplemente tiene varias técnicas para evitarlo, ponerse ansioso o agresivo es una de ellas. Si consigue resultados con una de ellas las repetirá siempre porque tiene un problema y esa solución le funciona. ¿Cual es la solución? No hay una pócima mágica.....según mi experiencia, suele funcionar no ceder, sin enojarse y con calma, el animal ha de confiar en nosotros...¿Vosotros confiáis en alguien que os grita u os pega? ¿Confiáis el alguien asustado? ¿ Confiáis en alguien inseguro? No,No y No. Ellos no son tán diferentes, y Dina hoy vuelve a confirmarlo, no hay tanto perro ingobernable, sino malos profesionales y dueños confundidos. Mi recomendación es que elijáis muy bien al profesional que va a hacer el trabajo, un peluquero canino no sólo corta el pelo de vuestro perro...tiene que conseguir que animales que nunca son cepillados se dejen, ha de limpiar orejas y glándulas anales ....debe cortar las uñas...ha de tocar a vuestro perro por todo el cuerpo para hacer un buen trabajo, y ha de conseguir hacerlo. Muchas veces en una hora y media conseguimos cosas que no consigue nadie con un perro y no es una tarea que se pueda encomendar a cualquiera. Ahora hay muchos nuevos profesionales con pocas horas de prácticas y poca o ninguna formación y con precios muy baratos, nadie da duros a pesetas , un buen peluquero no sólo pela, es a la vez psicólogo, cosmetólogo y estilista, y hará lo mejor para tu perro.
No confíes en quien no se toma en serio su trabajo y lo hace con poca formación, dañará a tu perro psicológicamente y le dará igual dañarlo físicamente aunque lo mime cuando llegas y cuando te vas. Que a alguien le gusten los perros no significa que sea un buen profesional.........
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